¡Que brillen las fortalezas!
- Mónica Caballero Andrade

- 5 jul 2022
- 2 Min. de lectura
El 15 de julio se celebra el Día Mundial de las Habilidades de la Juventud, por lo que quisiera dejarte algunos puntos importantes a considerar en esta fecha.
¿Te ha pasado que observas constantemente dificultades en tus hijos y quisieras que eso cambiara?
A veces nos enfocamos en ver los errores de los demás y en ocasiones recalcamos las de los hijos, y les exigimos que las cambien, la mayoría de ellas no con una mala intención, sino porque queremos que sean los mejores, buenos hijos, hermanos, compañeros, amigos, estudiantes y en un futuro buenos padres, esposos y trabajadores.
Sin embargo, estas exigencias pueden llegarlos a hacer sentir que no son suficientes, o que es demasiado para sus capacidades, lo cual los agobia porque en el fondo desean complacernos.
Por ello, hoy quiero invitarte a cambiar de lentes, y mirar a tus hijos desde otra perspectiva.
Atrévete a descubrir sus fortalezas y capacidades, las aprecies y las destaques por encima de sus defectos.
En ese sentido, a continuación, te dejo algunas de las fortalezas que, según investigaciones, poseen los adolescentes.
Intimidad, gratitud y humor son las principales, las cuales son estrategias de afrontamiento fundamentales en esta etapa de la vida.
El optimismo: actúa como protector ante la adversidad y el estrés, así como amortiguador de la enfermedad, incrementando la calidad de vida.
La espiritualidad: aporta un sentido de vida y apoyo emocional, además es sustancial para la felicidad y el bienestar psicológico.
Creatividad: son capaces de idear alternativas y de imaginar nuevas soluciones para enfrentarse a los problemas.
Ser curioso/a y estar abierto a variedad de pensamientos, perspectivas e ideas, lo cual facilita el aprendizaje y un mejor rendimiento académico.
Conductas altruistas: al desarrollar más la capacidad de empatía, así como tener en cuenta que las experiencias más importantes tienen consecuencias trascendentales.
Ahora te invito a que le digas a tus hijos sus fortalezas y le digas cuanto las aprecias, y ayúdalos a pensar cómo pueden usar esas habilidades.
¿Ya identificaste las fortalezas de tus hijos? Coméntamelas.












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